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Belluno Padua Rovigo Treviso Venecia Verona Vicenza
Aunque nunca he vivido aquí, soy mitad véneto; esto hace que cada vez que vengo aquí me sienta como en casa. Esta región lo tiene todo: montañas únicas como los Dolomitas, colinas de ensueño como la Valpolicella, llanuras, costas bajas con inmensas playas doradas, una laguna, territorios como el Polesine, ciudades inmortales como Venecia, llenas de encanto como Verona y Padua, una miríada de pequeños pueblos con castillos y villas de ensueño... Y aquí desembocan el Po y el Adigio, los dos ríos más largos de Italia; hay más de cien kilómetros de costa del lago de Garda, el lago más grande de Italia. Y territorios hermosos poco conocidos como la Lessinia con paisajes de cuadro impresionista. La cocina véneta es completa; entre mis platos favoritos están: Risi e bisi, Risotto al Radicchio rosso di Treviso, Bacalao a la vicentina con polenta, y de postres Tiramisù o Pandoro de Verona; en los vinos destacan los blancos, con el Prosecco de Valdobbiadene y el Cartizze por encima de todos.

Superficie: 3608,86 Km² Población: 197.767 Municipios: 60
Belluno: Piazza dei Martiri
Belluno: Piazza dei Martiri



Teatro Dino Buzzati, edificio de estilo neoclásico
La nueva Iglesia de Santa María Inmaculada
Una de las cervecerías más famosas de Italia

Superficie: 2145,19 Km² Población: 931.469 Municipios: 101
Padua: Basílica de San Antonio
Padua: Basílica de San Antonio



Prato della Valle, la plaza más grande de la ciudad con algunas de las 78 estatuas que la componen en primer plano
El histórico Caffè Pedrocchi, conocido también como el "Café sin Puertas" porque hace un siglo estaba abierto día y noche, fue en aquella época punto de encuentro de la élite de Padua
Basílica Catedral de Santa María Asunta, más conocida como el Duomo, edificada en el siglo XVI y en cuya obra participó Miguel Ángel

Superficie: 1823,50 Km² Población: 227.452 Municipios: 50
Taglio di Po: Iglesia de San Francisco de Asís
Taglio di Po: Iglesia de San Francisco de Asís



En un día de principios de enero deambulé por este municipio disperso en el Delta del Po. Así comenzó un fascinante viaje por esta tierra, formada por varias islas, situada por debajo del nivel del mar Adriático; todo ello protegido por poderosos diques. Porto Tolle está compuesto por tres islas y por lo tanto completamente rodeado de agua. Recorro el Po de Venecia y, tras cruzar el puente, entro en la isla de Donzella donde se encuentra la sede municipal en la localidad de Cà Tiepolo; algunas fotos en la plaza del ayuntamiento donde está la estatua de Ciceruacchio, nombre de batalla de Angelo Brunetti, héroe del Resurgimiento. Llego a la Sacca di Scardovari para admirar las características casitas de los pescadores de mejillones y almejas; esta laguna para los habitantes del lugar es un tesoro económico; para mí es un lugar romántico, nunca visto antes. Dejo esta tierra al atardecer donde el sol y el agua se encuentran en el triunfo de la naturaleza; dentro de poco será hora de buscar una trattoria donde degustar las especialidades del Polesine.
Una tarde en el bajo Véneto para respirar un poco de tranquilidad en las llanuras aluviales del Polesine. Deambulando sin rumbo encontré este pueblito entre Rovigo y el río Po. Dejando el coche en el gran aparcamiento de la Piazza Giovanni Paolo II, visito la adyacente Iglesia parroquial de San Andrés apóstol. Este imponente edificio religioso, a pesar de las numerosas reformas, conserva una hermosa fachada y un soberbio campanario; también el interior merece una visita con unos minutos de recogimiento ante el estupendo altar mayor. A pocos pasos llego al Castillo, una bella arquitectura militar disputada varias veces entre los venecianos y los Estensi. Esta fortaleza rodeada por un foso, tiene un gran parque donde es agradable pasear; yo estuve fuera de temporada pero parece que a menudo es escenario de importantes eventos. Saliendo del pueblo me detengo a observar desde fuera la actual Villa Pasqualini Canato, que en el pasado renacentista fue un Casino de Caza Estense.
Pasé un día en esta tranquila ciudad, fácil de recorrer en coche. Por la noche aparqué cómodamente a dos pasos del centro, cerca de la histórica Porta San Bortolo; el menú del restaurante elegido tenía precios bajos... lástima que se trataba de mini porciones; que sumadas a un buen Morellino di Scanzano, para poder hacer una cena decente, hicieron una buena suma. Un paseo por la zona peatonal; pasando por la plaza Garibaldi con el elegante e iluminado Palacio de la Cámara de Comercio, y en el centro la estatua del Héroe de los Dos Mundos. Tras pasar el Ayuntamiento se entra en la gran plaza, corazón de la ciudad con el monumento decimonónico al Rey Vittorio Emanuele II y los importantes Palacio Roncale y el antiguo palacio Roverella. Continúo en la relajada atmósfera invernal hasta el monumento a Giacomo Matteotti; detrás de él lo que queda de la parte medieval de Rovigo: el Castillo y la Torre Donà.

Superficie: 2479,26 Km² Población: 878.545 Municipios: 94
San Polo di Piave: Castillo neogótico Papadopoli-Giol
San Polo di Piave: Castillo neogótico Papadopoli-Giol



Municipio
Piazza Grande con la Catedral de San Juan Bautista
Iglesia parroquial de la Conversión de San Pablo

Superficie: 2477,50 km² Población: 834.940 Municipios: 44
Quarto d'Altino: Iglesia de San Miguel Arcángel
Quarto d'Altino: Iglesia de San Miguel Arcángel



Calle cerca del pequeño puerto
Playa frente al Faro del Cavallino
Villa Giustinian, villa veneciana rodeada de muros medievales



Centro histórico, al fondo la Torre del Reloj construida en el siglo XII
La céntrica Via Piave
Galería Matteotti, diseñada y construida en estilo Liberty



Gran Canal
Puente de los Descalzos
Iglesia de Santa María de Nazaret

Superficie: 3096,76 Km² Población: 927.231 Municipios: 98
Verona: la Arena
Verona: la Arena



Hace algunos años pasé un día de verano en uno de los parques de atracciones más famosos de Italia. Todo fue fácil, desde la compra online de las entradas, el cómodo estacionamiento, hasta el libre acceso a cada atracción. Y aquí viene lo divertido porque para subir al trenecito que da la vuelta completa al parque hay una fila interminable. Con un poco de paciencia llega también mi momento de disfrutar el paseo que por unos minutos me hace volver a ser niño. De ahí al Jungle Rapid, donde entre cascadas y chorros de agua lanzados por cañones controlados por los espectadores me refresco un poco en esta tórrida tarde de julio. En busca de emociones fuertes subo al Blue Tornado, un “avión” que me sacude, voltea y zarandea. Una pausa para comer una pizza en uno de los muchos puntos de comida dentro del parque, y luego a probar otras atracciones. Una de las atracciones más emocionantes fue Mammut, una pequeña montaña rusa con acrobacias escalofriantes. Se hace de noche, encienden las luces y doy un romántico paseo en gigantescas tazas de té; un último paseo por el Parque que lentamente se va vaciando y es hora de retomar la autopista que me lleva a casa.
A pocos kilómetros de la ciudad de Verona visité este gran centro agrícola e industrial. Aparqué cerca de Villa Bocca Trezza, bordeando el altísimo muro de cerramiento, me dirigí hacia el cercano centro de la ciudad. Al llegar a la entrada de esta villa del siglo XVIII, aquí más conocida como “Mil y una Rosa”, me encontré con dos lápidas: una recuerda que este lugar durante el Resurgimiento dio alojamiento a personajes ilustres; durante la I Guerra de Independencia al Duque de Génova Fernando de Saboya, hijo del Rey Carlos Alberto, durante la III Guerra de Independencia a Alberto Archiduque de Austria; foto de rigor entre las placas conmemorativas. A pocos pasos me encuentro frente a la Iglesia parroquial de San Andrés apóstol, patrón de la ciudad. Se ha hecho la hora del almuerzo y cerca encuentro una trattoria donde puedo almorzar en el patio bajo una fresca pérgola. Polenta y bacalao para chuparse los dedos; los acompañé con una copa de Bianco di Custoza, vino producido en los viñedos alrededor de la homónima fracción al suroeste de Sommacampagna. Por la tarde, relax completo paseando a la sombra de los grandes árboles del parque de Villa Venier.
Un domingo de verano visité este pueblo en la orilla veneciana del Lago de Garda. En la entrada del pueblo hay un enorme aparcamiento donde dejé el coche. Desde allí, en un par de minutos me encontré frente a una hermosa muralla dentro de la cual hay un laberinto de calles con tiendas de todo tipo. Paso frente a la iglesia parroquial dedicada a los Santos Zenón y Martín; sobre la hermosa entrada de estilo neoclásico, hay dos grandes nichos con las estatuas de San Juan Bautista y San Zenón. Llego a la Piazza Vittorio Emanuele, el pequeño salón de la ciudad al fondo del cual está el Palacio Municipal, que en la fachada que da al pequeño puerto lleva la inscripción “Lasize Primo Comune d’Italia”. Paso por la Porta del Lion, llamada así porque en la pared está incrustada una escultura de mármol que representa al León de San Marcos, símbolo de la Serenísima República de Venecia. Después de un granizado de menta, disfrutado frente al hermoso Castillo Scaligero, me tumbo en un gran banco de cemento a orillas del lago; en el horizonte aparece, cada minuto más grande, un barco que va de una orilla a otra del Garda. Es el atardecer cuando dejo el pueblo fortificado para regresar a casa.



Puerto turístico en el Lago de Garda
Hotel Catullo con al lado los restos de la Fortificación Medieval
Paseo junto al lago Francesco Lenotti



Santuario en la roca Madonna della Corona
Balcón de Julieta
Puente fortificado sobre el río Adigio adyacente a la Fortaleza de Castelvecchio

Superficie: 2720,42 Km² Población: 854.568 Municipios: 113
Vicenza: Piazza dei Signori
Vicenza: Piazza dei Signori



Piazza Carli: en primer plano la Fuente del Fauno
Iglesia del Santísimo Redentor llamada la Catedral
Palacio del Capitán